Erecciones... matutinas, espontáneas, no deseadas. Las hay de todo tipo, y eso es normal, incluso cuesta que aparezcan. El “momento de la erección” puede ser un momento de tremenda presión para los hombres. Nos pesa el mandato de rendir siempre al máximo, que se nos pare y estar a la altura, SIEMPRE. ¡Pero somos humanos! Tenemos emociones, pasamos por altibajos y enfrentamos desafíos y problemas de salud, que a menudo se pueden ver o expresar a través de nuestros cuerpos. ¡Como resultado, nuestras erecciones pueden verse afectadas!
Debemos reconocer que gran parte de nuestra autoestima está en juego en nuestras erecciones, y el hecho de que estemos acostumbrados no significa que sea natural o que debamos quedarnos cómodos con esta idea. Las presiones sociales sobre los hombres son muchas y, a veces, se manifiestan en la cama. También sabemos que suele haber una pareja, otra persona, involucrada. Y solemos pensar que nos están sometiendo a prueba y que esperan un rendimiento mecánico exento de imprevistos, ¡y no es así!. Por lo tanto, es mejor tomar el asunto a la ligera y hablar de ello. A veces solo necesitamos verbalizar lo que nos preocupa para encender las cosas.
Se espera que las erecciones fluctúen en intensidad y regularidad. Si cualquiera de los dos se cae, no significa necesariamente que haya algún problema. De todos modos, si notas alguna dificultad a la hora de conseguir una erección, debes evitar alarmarse. Hay cosas simples que podemos hacer para mejorar nuestra salud sexual sin necesidad de medicamentos.
✅ Una buena alimentación: alimentos frescos, sin procesar. Las dietas a base de verduras, frutas, frutos secos y legumbres aportan una fuente de óxido nítrico que juega un papel fundamental en la fisiología eréctil.
✅ Ejercicio físico: la actividad física también libera óxido nítrico y antioxidantes que harán feliz a tu compañero de aventuras. Lo importante es generar buenos hábitos y, con el tiempo, ver mejores resultados.
La alimentación y el ejercicio físico nos aportan el cuidado de las arterias clave en la erección.
✅ Buenos hábitos de sueño: En promedio, menos de cinco horas de sueño pueden disminuir el deseo sexual y tener un impacto negativo en tus erecciones. La mayoría de los humanos necesitan de 7 a 8 horas de sueño. Apunta a eso.
✅ Combate el estrés: el estrés es otro gran enemigo del deseo y de la respuesta sexual satisfactoria. Por lo tanto, incorporar conductas para reducir el estrés mejorará tu salud física, mental y sexual. Lo más recomendable es la actividad física diaria. También puedes intentar incorporar técnicas de respiración consciente o meditación.
✅ Buena comunicación con la pareja: reserve tiempo para hablar sin interrupciones de otras personas o distracciones como teléfonos, computadoras o televisión. Piensa en lo que quieres decir. Ten claro lo que quieres comunicar. Haz que tu mensaje sea claro, para que su pareja lo escuche con precisión y entienda lo que quiere decir. Habla acerca de lo que te está sucediendo y cómo te afecta.
✅ Practica PE: Uno de los efectos que aparecen rápido al empezar a practicar PE es la rápida mejora de las erecciones. La mayoría de los ejercicios promueven un aumento circulatorio, favoreciendo así la aparición de mejores erecciones.
✅ Reduce la pornografía: el punto aquí es que, sexualmente, la pornografía sobre-estimula el cerebro. Nuestros cerebros son excelentes para adaptarse a la sobreestimulación. En ocasiones, tomarse un descanso o simplemente establecer ciertos límites, como ver una vez por semana o cada dos, ayuda a recuperar la sensibilidad ante otros estímulos y narrativas eróticas. Lo importante es variar y no apoyarse en solo una cosa para erotizarte.
✅ Masturbación saludable: ¡La masturbación no está mal! Lo que sí puede causar daño emocional, sin embargo, son los hábitos asociados a él, como el consumo excesivo de pornografía. La masturbación puede ser un hábito súper enriquecedor, gratificante si lo aprovechas. Puede explorar muchas formas de tocarse a sí mismo, ser consciente de su nivel de excitación, respirar e imaginar. ¿Alguna vez te has parado a pensar cuánto dependes de los estímulos visuales para tocarte?
Así que ahora que lo sabes, prueba uno de estos, y tal vez te ayude. Pero, por supuesto, no es necesario que los pruebes todos. Quizás, con solo incorporar uno, el resto de las piezas encajen. En cualquier caso, son todos hábitos saludables de gran valor más allá de sus beneficios para la erección masculina. ¡Así que adelante!